Columna - Empresas Familiares

Valores compartidos, gobernanza y entornos innovadores: Su importancia en la proyección de la empresa familiar

Carlos Muñoz Saravia
Por:
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Frecuentemente, los inversionistas miran expectantes indicadores como el S&P, NYSE, el Bovespa o el Ipsa para conocer el desempeño bursátil de las empresas en mercados públicos. En esa dinámica, suele olvidarse que tras muchas de las sociedades que cotizan en Bolsa hay una historia de emprendimiento, y que varias de ellas siguen siendo controladas por accionistas fundadores y/o sus familias.
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¿Por qué los Walton pudieron crear un gigante como Walmart, o un inmigrante como Horst Paulmann pudo transformar un pequeño supermercado de Temuco un gigante del retail como Cencosud? Porque aplicaron enfoques visionarios e innovadores en la definición de las estrategias y en la gestión del negocio. Esto, sumado a que además se preocuparon de generar un estilo de gestión compatible con la proyección del mismo.

Lo anterior resume varias características propias de cualquier empresa familiar exitosa: visión, innovación, gobernanza y valores compartidos por todos sus integrantes.

Hoy es muy relevante, la contribución que las empresas familiares hacen a la economía y a las comunidades. Las decisiones de inversión y las fórmulas de financiamiento, deben estar plenamente alineados con los objetivos de sostenibilidad del negocio.

Conciliar objetivos 

A medida que el negocio pasa de una generación a la siguiente, las prioridades van cambiando. Diferentes estudios han mostrado que se va produciendo una evolución y que de la segunda a la tercera generación, la familia empieza a pensar en cuál es su participación e impacto en la comunidad. Luego, a medida que se integra la cuarta generación, la atención se centra en el legado.

Por eso se debe trabajar en una gobernanza familiar que permita una sintonía entre todos los miembros, fortaleciendo la comunicación entre las diferentes generaciones y garantizar la longevidad y sostenibilidad del negocio. Definir, por ejemplo, instancias en las cuales la familia se reúna periódicamente y realice una revisión anual de la estrategia corporativa, la estructura ejecutiva, el modelo de negocios, la visión y su impacto en la sociedad.

No existen fórmulas infalibles para seguir creciendo y proyectándose, pero conciliar los objetivos es clave para la salud presente y futura de toda actividad familiar. De ello dependen decisiones que deben adoptarse en sintonía con los valores familiares y, también, con las preferencias cambiantes de los clientes y consumidores, las crecientes expectativas de sostenibilidad presentes en la sociedad y con mercados crecientemente competitivos.